6 consejos para viajar durante el invierno

• por Ana Belén Moreno

Viajar durante el invierno puede ser algo más complicado que en otras épocas del año, aunque todo depende del destino al que te dirijas. Si es un lugar frío, tendrás que empacar mucha más ropa y dependerás del clima en todo momento para planear tus actividades al aire libre. No obstante, los viajes en invierno tienen una magia especial que no se encuentra en otras estaciones del año.

En invierno, la mayoría de los viajeros espera llegar a su destino con el mínimo de problemas y el máximo de diversión. Sin embargo, la nieve, el hielo o la lluvia pueden ser un inconveniente en algunas ocasiones. Por ello, aquí encontrarás algunos consejos y tácticas para viajar durante el invierno de la manera más cómoda posible.

Reserva un vuelo sin escalas

En ocasiones, surgen problemas en los aeropuertos de conexión debido al mal clima. Si tu primer vuelo de salida se cancela, podrás regresar a casa desde el aeropuerto. Sin embargo, si te quedas sin vuelo en un aeropuerto de conexión, la situación resulta peor.

Tendrás que encontrar un nuevo alojamiento para quedarte hasta que salga el vuelo a tu destino o hasta que puedas volver a casa. Por ello, lo ideal es volar sin paradas siempre que sea posible. Busca siempre vuelos sin escalas y, a ser posible, en aeropuertos cercanos.

Consulta el tiempo antes de partir

Si te ha sido imposible encontrar un vuelo sin escalas, comprueba el tiempo que hará en las ciudades de conexión, así como en los aeropuertos de salida y destino. Es posible que tengas que llevar diferentes tipos de ropa, pues el tiempo puede cambiar mucho de un destino a otro.

Evita conducir durante una tormenta

Si vas a viajar en coche y el tiempo no es el adecuado, no te precipites. Siempre es mejor llamar al alojamiento y avisar de tu retraso que exponer tu seguridad y la de tus acompañantes. Consulta el pronóstico meteorológico antes de partir.

Si existe la posibilidad de que el mal tiempo complique el viaje, asegúrate de tener ropa y zapatos adecuados para un clima frío, así como agua y comida, dispositivos cargados y el depósito lleno de gasolina.

Escoge la ropa adecuada

A la hora de hacer la maleta para viajar a un destino frío, tendrás que llevar muchas más capas para mantenerte caliente durante tu estancia. No olvides llevar una chaqueta de plumón, una bufanda, un gorro y guantes. Ten en cuenta que, en función de las actividades que tengas planeadas en tu destino, esta elección puede variar.

Eso sí, no olvides llevar un buen par de botas, pues los pies son propensos a enfriarse más rápido que otras partes del cuerpo, por lo que querrás tenerlos calientes para afrontar mejor el clima frío.

Otros accesorios para protegerte del frío

Además de vestirte a capas y llevar complementos para protegerte del frío, hay otros accesorios que puedes incluir en tu equipaje y que te resultarán de gran ayuda en los destinos fríos. No te olvides de llevar un buen bálsamo labial y una crema de manos.

Los labios son especialmente sensibles durante el invierno, y aplicar un bálsamo labial ayuda a prevenir los labios secos y las grietas. Asimismo, aunque lleves guantes, probablemente te los quitarás todo el tiempo para usar el teléfono y sacar fotos. De ahí la recomendación de llevar crema de manos.

Reserva tus actividades con antelación

Al igual que ocurre con los viajes que hacemos en verano, en invierno, sobre todo en la temporada alta de Navidad, algunos destinos turísticos tienen mucha demanda. Por ello, antes de partir hacia tu aventura, es conveniente que hagas las reservas pertinentes.

No olvides tampoco confirmar con antelación los horarios de cada sitio que planees visitar para evitar largas esperas y ahorrarte colas innecesarias, así como pasar frío antes de entrar.

Toma nota de estos consejos para que tus vacaciones de invierno vayan sobre ruedas y evites, en la medida de lo posible, cualquier contratiempo.