Los viajes durante el embarazo pueden ser una experiencia muy diferente a lo que estás acostumbrada. Sin duda, no estará exenta de desafíos, pues el embarazo te cambia el día a día de muchas maneras.
Sin embargo, eso no significa que tengas que quedarte en casa y evitar los viajes durante los nueve meses de embarazo. Normalmente, es seguro viajar hasta las 36 semanas de embarazo. Eso sí, no dudes en consultarlo con tu médico para quedarte más tranquila.
Los siguientes consejos pueden ayudarte a planificar el viaje antes del nacimiento del bebé para que sea cómodo y seguro, así como una experiencia agradable.
Planifica el viaje con prudencia
Durante el primer trimestre del embarazo, son comunes las náuseas matinales para muchas mujeres. En el tercer trimestre, el bebé habrá crecido considerablemente, por lo que puede ser un poco incómodo moverse de un sitio a otro. Por tanto, el segundo trimestre suele ser el mejor momento para que las mujeres embarazadas viajen.
Los problemas más comunes del embarazo se dan en el primer y en el tercer trimestre. Durante la mitad del embarazo, la energía vuelve, las náuseas matinales desaparecen y todavía es fácil moverse.
Elige bien tu destino
Aunque este puede ser un consejo que se aplica a cualquier caso, cuando se está embarazada es muy importante elegir un destino que sea lo más seguro posible. Es decir, que tenga agua potable, buena calidad de aire, bajo riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos, etc.
Si lo deseas, puedes consultar con tu médico para asegurarte de que el país que vas a visitar es seguro durante el embarazo. Como norma general, lo mejor es evitar países en los que se exija alguna vacuna.
Haz la maleta lo más ligera posible
El cuerpo de una mujer embarazada ya está trabajando duro para crear una nueva vida, por lo que es probable que se canse con facilidad. Intenta llevar poco equipaje, así no tendrás que arrastrar una maleta pesada ni tener que lavar varias cargas de ropa cuando regreses. Escoge atuendos sencillos y cómodos que ocupen poco espacio en la maleta.
Lleva agua y comida sana
El día que vayas a partir hacia tu destino no olvides llevar una botella de agua para mantenerte hidratada en todo momento, ya sea en carretera o en un vuelo.
Además, los aeropuertos no siempre tienen muchas opciones de comida saludable, y lo que está disponible tiende a ser caro. Para ahorrar dinero y evitar tener que comer calorías vacías, puedes llevar tu propia selección de snacks saludables, como frutas y verduras, siempre que sea posible.
Descansa con frecuencia
Es normal que te sientas más cansada durante el embarazo. Por ello, es importante que descanses siempre que lo necesites. Poner los pies en alto a menudo también es de gran ayuda.
Tu cuerpo ya hace un gran esfuerzo, por lo que tomar descansos cada vez que te sientas cansada es una buena manera de garantizar tu comodidad para viajar menos estresada.
Contrata un seguro de viaje
En general, el seguro de viaje no incluye la cobertura del embarazo y el parto, porque se considera una condición preexistente. No obstante, sí puede cubrir los gastos médicos que resulten de las complicaciones del embarazo. Tendrás que asegurarte de que el plan de seguro de viaje lo indique específicamente.
Cuidado al elegir las actividades en el destino
Aunque pueda parecer algo obvio, es importante aplicar un poco de sentido común a la hora de elegir qué actividades se realizan en los viajes durante el embarazo. Por ejemplo, tendrás que evitar las que pongan en riesgo tu seguridad, como el snowboard, el esquí acuático, el windsurf, etc.
Los parques de atracciones y toboganes acuáticos quedarán fuera de tus planes debido a la aceleración y a las paradas repentinas. También es prudente mantenerse lejos de jacuzzis y saunas, ya que el calor extremo no es bueno para el feto.
Aunque estés embarazada, también puedes vivir aventuras y conocer lugares increíbles. Solo ten en cuenta los consejos que te hemos dado para que todo vaya sobre ruedas. Y recuerda, si tienes alguna duda, consulta siempre con tu médico.
