Al norte de la isla de Mallorca, en el término municipal de Alcudia, se encuentra Pollentia, uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de las Islas Baleares. Valiosos vestigios del pasado romano en este territorio han llegado hasta nuestros días, permitiéndonos sumergirnos en la historia.
El yacimiento arqueológico fue descubierto en el siglo XVII. Sin embargo, no fue hasta inicios del siglo XX cuando comenzaron a realizarse excavaciones de forma rigurosa y sistemática. ¿El objetivo? Descubrir los secretos y tesoros que permanecían bajo tierra. ¿Quieres conocer Pollentia? ¡Acompáñanos!
La ciudad romana de Pollentia
La ciudad romana de Pollentia fue fundada en el año 123 a.C. por el político y militar romano Quinto Cecilio Meteo Pío tras la conquista de la isla. Pronto se convirtió en la ciudad romana más importante del archipiélago balear.
Su enorme desarrollo vino dado en gran medida por su estratégica situación entre dos puertos: uno en la bahía de Pollença y otro, más relevante, al sur de la ciudad. Así, el asentamiento llegó a extenderse por más de 16 hectáreas de territorio. No obstante, Pollentia entró en un periodo de decadencia y terminó convirtiéndose en una necrópolis a partir del siglo VI.
El yacimiento arqueológico romano de Pollentia
Los trabajos y excavaciones realizadas en el yacimiento han llevado a obtener una imagen de lo que sería el urbanismo de la antigua ciudad romana. Se cree que esta mantenía la estructura prototípica de la época, con un teatro, una zona residencial y un foro. Todas las áreas pueden percibirse claramente en la actualidad.
El teatro
El teatro se encontraba ubicado en la periferia de la ciudad, cerca del puerto de Alcudia. Fue el primer emplazamiento descubierto. Fue excavado en la roca, aprovechando la suave pendiente del terreno, y en su momento podía albergar a unos 2.000 espectadores.
Aún se pueden percibir claramente las diferentes partes de su estructura: las gradas, la orquesta semicircular y el escenario. Se cree que este último tenía una planta rectangular y estaba formado por una estructura de madera que se disponía a mayor altura que la orquesta para facilitar la visibilidad.
El foro
El foro era el epicentro de la vida social y de la actividad comercial de la ciudad romana. En la actualidad, aún podemos observar los restos de varios de sus edificios. Destaca el Capitolio, templo principal de la ciudad que se halla en una posición elevada y que está ubicado junto a otros dos templos de menor magnitud.
A ambos lados del foro se hallan los vestigios de la que sería la zona comercial de la ciudad o tabernae. Eran pequeños habitáculos en los que se desarrollaban actividades de artesanía y comercio.
La Portella
La Portella fue la zona residencial de la ciudad de Pollentia. Se conservan aún restos de varias domus (casas de familias con un buen nivel económico) que permiten imaginar la disposición urbana de esta zona. Se cree que las viviendas se hallaban conectadas con el foro a través de una vía porticada de la que partían otras calles menores.
La Casa de los Dos Tesoros es una de las más destacadas, ya que permite contemplar la típica disposición de una vivienda con atrio central y habitaciones dispuestas en torno a este. Otra de las viviendas más relevantes es la Casa de la Cabeza de Bronce, que recibe su nombre por la cabeza de niña realizada en bronce que se encontró en ella.
Otros hallazgos interesantes en el yacimiento de Pollentia
En el emplazamiento de la antigua ciudad de Pollentia se conservan también algunos restos de la antigua muralla romana que rodeaba la ciudad y la protegía de posibles ataques. Se cree que esta se construyó en dos etapas: una en el siglo I, de la cual apenas quedan restos, y otra en el siglo III, más perceptible hoy en día.
Asimismo, se ha constatado la existencia de un antiguo acueducto y se han hallado restos de la necrópolis que se habilitó en este lugar. Encontrarás igualmente un museo en el que podrás contemplar diversos objetos procedentes de las excavaciones arqueológicas. Sin duda, se trata de una visita de lo más completa.