Descubre la magia de la comida mexicana

• por Elena Sanz

México es un país con una amplia riqueza histórica y cultural, algo que, sin duda, queda reflejado en su gastronomía. La comida mexicana es altamente valorada a nivel internacional. Además, los establecimientos han sabido reconocer y cuidar el legado culinario de sus antepasados. Por ello, siguen dedicando un gran empeño a la elaboración de sus recetas.

Podemos observar así la fusión de los ingredientes y técnicas prehispánicas con las influencias recibidas tras la colonización. Además, cada región del país posee sus propias recetas características, por lo que las alternativas son numerosas. Te invitamos a descubrir algunas de las más representativas.

Los mejores platos de la comida mexicana

Tacos, burritos y fajitas

Agrupamos estos tres platos no solo por ser los primeros que vienen a nuestra mente al pensar en comida mexicana, sino porque comparten su base. Sin embargo, existen diferencias entre ellos que los convierten en las opciones más versátiles y deliciosas de la gastronomía de México.

Tacos, burritos y fajitas se caracterizan por compartir una base de tortilla que se enrolla y se rellena de distintos ingredientes. En el caso de los tacos, se trata de una tortilla de maíz doblada a la mitad en la que se incluye algún tipo de carne (bien sea pollo o ternera), así como chiles, tomate y cebolla.

También suelen añadirse distintos aliños y salsas. Sin embargo, a pesar de que estos son los ingredientes más básicos, las variantes son infinitas y dependerán de la región en la que nos encontremos.

Por otro lado, los burritos y las fajitas se elaboran con una tortilla de trigo. Ambos se preparan también con carne y verduras, pero en el caso de los burritos lo más característico es que incluyen frijoles con independencia del resto de ingredientes.

Pozole

Esta receta típicamente mexicana consiste en una sopa elaborada a base de cacahuazintle, una variedad de maíz más grande y tierna que la habitual. Se agrega, además, carne de pollo o de cerdo y diversos ingredientes que varían en cada lugar del territorio mexicano.

Así, el pozole rojo, típico de Sinaloa y Jalisco, incluye una salsa a base de chile guajillo. El pozole verde, más común en el estado de Guerrero, se elabora con una salsa de tomate verde y chiles poblanos. Mientras, el pozole blanco, característico de la zona central del país, no lleva ninguna salsa.

Finalmente, la sopa se sirve en un tazón y se suele acompañar de otros ingredientes que realzan el sabor como la lechuga, la cebolla, el queso o el aguacate.

Chiles rellenos

Para preparar este plato se emplean las variedades de chile de mayor tamaño, asados y pelados, y se rellenan con distintos ingredientes. Generalmente, el relleno consta de carnes, verduras y queso. Posteriormente, el chile se envuelve en una capa de huevo y se fríe, dando lugar a un manjar que hace las delicias de todo el que lo prueba.

Una de las variedades más sabrosas y conocidas es el chile en nogada, típico del estado de Puebla. En este caso, se utilizan chiles poblanos que se rellenan con un guiso de picadillo de carne (de cerdo o de ternera) y frutas (plátano, pera o manzana). Después, se cubre con crema de nuez, cilantro y granada.

Cochinita pibil

Esta receta, originaria de la península de Yucatán, es todo un placer para los sentidos. Se trata de un plato cargado de tradición que los mayas ya preparaban para conmemorar la festividad del Día de Muertos.

Consiste en un guiso de carne de cerdo adobada en achiote (un condimento que proporciona el característico sabor a la receta). Todo ello se envuelve en una hoja de plátano y se cocina en un horno de tierra.

La comida mexicana: Patrimonio de la Humanidad

Los anteriores son solo algunos ejemplos de la extensa variedad de platos que nos ofrece la gastronomía mexicana. Su relevancia es tal que en el año 2010 fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

La comida de México supone un recorrido por su historia, un homenaje a sus raíces, una seña de identidad del pueblo mexicano. Es sabrosa, intensa, colorida, llamativa y creativa. ¡No te dejará indiferente!