Si eres un amante del sol y el mar, las Islas Canarias son un destino que te resultará apasionante. En este archipiélago encontrarás playas magníficas, salvajes y únicas en las que descansar o practicar diversas actividades. Entre todas ellas destaca especialmente la playa de Sotavento, un auténtico paraíso majorero.
Ubicada en la península de Jandía, al sur de Fuerteventura, esta playa goza de gran reconocimiento tanto a nivel nacional como internacional. No es de extrañar, pues posee una belleza virgen y majestuosa difícil de encontrar en las masificadas costas españolas. ¿Quieres conocerla más en profundidad? Entonces, te invitamos a seguir leyendo.
La playa de Sotavento, una maravilla natural
Para descubrir la playa de Sotavento habrás de dirigirte hacia el municipio de Pájara, en el sur de la isla. A través de un camino sin asfaltar podrás acceder fácilmente en coche hasta este privilegiado entorno. Y no dudes de que, nada más llegar, quedarás fascinado por lo que encontrarás.
Cabe mencionar que hablamos en realidad de un conjunto de cinco playas con nombre propio: playa de la Barca, Risco del Paso, Mirador, Los Canarios y Mal Nombre. Todas ellas conforman lo que coloquialmente se conoce como playa de Sotavento.
En total, esta playa cuenta con casi 10 kilómetros de extensión, una arena fina y dorada y unas aguas claras y turquesas. La estampa nada tiene que envidiar a las afamadas playas del Caribe. Pero, además, uno de sus principales atractivos es que se trata de una playa virgen, rodeada de un entorno natural sin urbanizar ideal para escapar de aglomeraciones y masificaciones.
La playa se encuentra envuelta por inmensas dunas que te harán sentir transportado al desierto; de no ser, por supuesto, por las aguas del Atlántico que bañan la costa formando pequeñas lagunas en la orilla. Y es que esta es otra de las características más distintivas de esta ensenada: para hallar profundidad en sus aguas habrás de adentrarte varios metros en el mar.
Disfruta la playa de Sotavento a tu manera
Además de por su belleza natural y paisajística, esta playa es apreciada por su versatilidad. Y es que no importa si la visitas a solas, en familia o con amigos, si eres un viajero tranquilo o aventurero: aquí encontrarás el plan perfecto para ti.
Decimos esto porque, pese a ser una playa virgen y natural, la misma dispone de ciertos servicios que aumentan la comodidad: por ejemplo, un parking y un chiringuito en el que tomar algo refrescante. Además, si en su orilla los más pequeños pueden bañarse con tranquilidad, mar adentro se dan las condiciones idóneas para la práctica de diversos deportes acuáticos.
Gracias a sus fuertes vientos, la playa de Sotavento es una delicia para los amantes del surf, la vela o el windsurf. De hecho, aquí se celebran importantes campeonatos mundiales de los deportes acuáticos que acabamos de mencionar. Además, es un buen punto para practicar buceo o esnórquel debido a la claridad de sus aguas.
Incluso, en algunas zonas de la playa está permitido el naturismo, por lo que si deseas estar en contacto con la naturaleza, no encontrarás un entorno más propicio.
Un recuerdo imborrable
Esta kilométrica playa es ideal para dar largos paseos por la orilla, refrescarse en sus aguas turquesas o disfrutar bajo el sol de la calma y la tranquilidad que ofrece.
Además, contemplar el atardecer desde este punto es una experiencia inolvidable; tanto es así que esta se ha convertido en una de las playas más fotografiadas debido a las tonalidades que forma el sol poniéndose en el horizonte.
Sin embargo, te recomendamos no abandonar el lugar sin antes haber visitado el mirador del Salmo. Aquí, en lo alto de un acantilado hallarás un llamativo banco pintado con los colores del arcoíris desde donde contemplar unas vistas espectaculares.
Podrás apreciar gran parte de la playa de Sotavento y admirar con distancia la laguna que se forma entre la arena y el mar. Especialmente, te sorprenderán los intensos tonos verdes y azules que toman las aguas.
En suma, esta es una de las mejores playas de Fuerteventura, a la altura de la famosa playa de Cofete y perfecta para quienes busquen disfrutar de un paisaje limpio y libre de contaminación humana. Cuando la conozcas, seguro que querrás volver.