La gastronomía vasca es cada vez más conocida, sobre todo en el mundo de la alta cocina. Tan solo la ciudad de San Sebastián tiene más restaurantes con estrellas Michelin por kilómetro cuadrado que cualquier otra ciudad del mundo. Aunque los vascos se han apresurado a absorber nuevos ingredientes y técnicas de elaboración, siguen sobresaliendo los platos típicos de la gastronomía vasca.
La cocina vasca es generosa, deliciosa y llena de carácter, como el territorio y sus habitantes. Una sutil mezcla de las influencias de su entorno y de su campiña. A continuación, encontrarás algunos de los platos tradicionales vascos más deliciosos, con sus ingredientes y algunas curiosidades sobre su historia.
Porrusalda
La porrusalda es una sopa tradicional vasca, cálida y reconfortante, que se elabora con verduras, como zanahorias, patatas, puerros y cebollas. La sopa se aromatiza con ajo y sal, y a veces se añade bacalao seco para potenciar su sabor.
Aunque es un plato vasco, la sopa también se consume en otras partes de España, como en La Rioja y en Castilla y León. Se recomienda decorar esta sustanciosa sopa con un poco de perejil picado antes de servirla.
Marmitako
Uno de los platos típicos de la gastronomía vasca más conocidos es el marmitako, un tipo de guiso de pescado que significa literalmente «cazuela». Se hace con atún, patatas, cebolla, ajo y pimientos rojos. El marmitako es un excelente representante de la cocina del País Vasco.
Este guiso se inventó en los barcos de pesca cerca de la costa, y aunque el atún es la opción más extendida, hoy en día existen numerosas variaciones del plato, según el tipo de pescado utilizado en la preparación del marmitako.
Zurrukutuna
La zurrukutuna es una sopa tradicional del País Vasco. El nombre del plato proviene de la palabra vasca zurrup, que significa sorbo, y kutuna, que significa agradable. Es una sopa de pan que se elabora con una combinación de pan de campo o baguette en rebanadas, cebolla, ajo, aceite de oliva, bacalao salado, pimentón y sal.
Los ingredientes se mezclan con agua y se cuecen hasta que los sabores estén bien integrados, y el pan se añade casi al final de la cocción. Si se prepara correctamente, la zurrukutuna debe quedar con trozos y sin demasiado líquido. Se sirve caliente en cuencos grandes.
Bacalao al pil pil
El bacalao es el ingrediente estrella en muchos platos típicos de la gastronomía vasca. El bacalao al pil pil es un bacalao salteado con ajo, aceite de oliva y guindilla, que se mezclan hasta que los aceites forman una emulsión cremosa. Se llama pil pil por el ruido que hace la piel al freírse en la sartén.
La elaboración del pil pil es un proceso laborioso, que puede durar entre 15 y 30 minutos, y el resultado final es una salsa cremosa que se echa sobre el bacalao antes de servirlo. Se recomienda adornar el plato con restos de ajo y guindillas, y servirlo caliente.
Angulas a la cazuela
Las angulas a la cazuela es un plato tradicional vasco que se suele preparar con una combinación de angulas, ajo, guindillas, aceite de oliva y sal. El ajo y las guindillas se rehogan en aceite de oliva en una cazuela.
A continuación, se añaden las angulas a la cazuela, se sazonan y se cocinan hasta que estén calientes y chisporroteen. El plato se sirve directamente de la cazuela y se come con un tenedor de madera.
Sopa ttoro
El ttoro es un guiso de pescado tradicional compuesto por diferentes tipos de pescado y marisco, cocinados en caldo de pescado con verduras y hierbas, y aromatizado con piment d’Espelette (una variedad de pimiento rojo local). De ser una humilde sopa de pescadores, el plato se ha extendido a todos los hogares y restaurantes de la región, dando lugar a diversas interpretaciones.
Algunos de los pescados más utilizados en el guiso son los pescados blancos, como la merluza, el rape, el congrio o el bacalao, mientras que la selección habitual de mariscos incluye mejillones, gambas, cigalas, pulpitos, vieiras y almejas. Suele acompañarse de picatostes y un vaso de buen vino blanco o cerveza.
Como has podido comprobar, los platos típicos de la gastronomía vasca son sencillos, pero deliciosos. Son recetas llenas de carácter que se han difundido de generación en generación y que están elaboradas con productos locales, el centro de muchos platos tradicionales.
