Es probable que alguna vez te hayas encontrado en la situación de estar planeando un viaje con ilusión y que, al aterrizar en tu destino, no pare de llover. Tenías organizadas muchas actividades al aire libre, pero no te preocupes, porque estás de vacaciones.
Afortunadamente, el mal tiempo no tiene por qué arruinar tu viaje. Todavía quedan muchas otras cosas de las que disfrutar. ¿El primer paso? No te dejes llevar por una actitud negativa. Después, sigue estos consejos para asegurarte unas vacaciones divertidas y relajadas, llueva o haga sol.
Planifica con antelación
Planificar con antelación puede ayudarte a evitar las inclemencias del tiempo. Investiga bien sobre el clima del destino que vas a visitar. Si no quieres que la lluvia arruine tu viaje, quizá deberías replantearte el lugar al que vas a viajar.
Si sabes que vas a viajar a una zona lluviosa, busca actividades culturales y de interior que puedas realizar durante los días de lluvia. Asegúrate también de hacer la maleta con ropa adecuada y botas de lluvia si sabes que vas a estar fuera.
Disfruta de la gastronomía local
Si no puedes hacer esa ruta de senderismo que tanto te entusiasmaba, ¿qué tal si aprovechas para conocer en profundidad la comida típica de la zona? Un destino también se disfruta con el paladar, por lo que si no para de llover en tu destino, el mejor plan es explorar la gastronomía de la zona.
Visita los mercados de alimentos, haz un tour de comida callejera o apúntate a una clase de cocina. Dependiendo de tu destino, puedes aprender sobre un tipo de comida diferente, sobre sus orígenes y variantes. Enfocar tu viaje en la gastronomía es una de las mejores maneras de disfrutarlo.
Relájate en un spa
Si llueve a cántaros, no te preocupes. Recuerda que estás de vacaciones y una de las razones principales por las que nos gusta viajar es descansar y desconectar del ajetreo diario. Por ello, un buen plan para pasar la tarde de un día lluvioso es relajarte en el spa de tu hotel o en otro cercano.
Sumérgete en las bañeras de hidromasaje, medita en la sala de vapor o date un masaje relajante. Si has tenido varios días de caminatas y excursiones, este día de lluvia en el spa te ayudará a reponer fuerzas para los siguientes.
Visita un museo
La actividad por excelencia de los días lluviosos es visitar un museo, pues te permitirá resguardarte de la lluvia mientras aprendes muchas cosas interesantes. Es una buena forma de conocer en profundidad la historia y costumbres de un lugar. Además, podrás acercarte a las esculturas originales y objetos antiguos que utilizaban nuestros antepasados. No hay plan mejor para aprovechar al máximo un día lluvioso.
Aprovecha para ir de compras
Si quieres llevar algún recuerdo de tu estancia a tus familiares o amigos, aprovecha ese día de lluvia para ir de tiendas por la ciudad. La mayoría de las grandes ciudades ofrecen mucho más que el típico centro comercial. Encontrarás muchas tiendas de regalos con recuerdos únicos. Las tiendas gourmet y los mercados también son lugares divertidos para pasar un día de lluvia.
Mójate un poco
Aunque es mejor no salir a la calle si llueve mucho y hay tormenta, no dejes que una pequeña llovizna te impida seguir tu itinerario de viaje. Puede que incluso te encuentres con la ciudad solo para ti, pues la lluvia puede desalentar a muchos turistas. Aprovecha para descansar en una cafetería y tomar un chocolate caliente. ¿A que no suena tan mal?
No te asustes si tus vacaciones no son exactamente como las habías planeado, simplemente tómalas como vienen. No te estreses si no para de llover en tu destino, pues eso es lo contrario de lo que se espera de unas las vacaciones.
Un poco de lluvia no hace daño a nadie, pero puede hacer que los senderos sean resbaladizos y traicioneros, así que no conviene realizar ninguna actividad o deporte extremo al aire libre como la escalada.
Hay muchas más ideas que puedes encontrar. Simplemente busca tu destino y las opciones disponibles en caso de lluvia. Planea con antelación, comprueba el tiempo justo antes de volar y lleva ropa adecuada por si acaso.