A veces, un viaje de fin de semana es todo lo que necesitamos para tener una experiencia inolvidable y renovadora. Aunque unas vacaciones largas a lugares exóticos pueden resultar más atractivas, también necesitarás un presupuesto más elevado y dedicar más tiempo en la organización del viaje.
Si buscas desconectar de la rutina y el estrés del día a día, toma nota de las siguientes herramientas que te ayudarán a organizar una increíble escapada de fin de semana sin complicaciones.
Elige un lugar cercano que se adapte a tus gustos
A la hora de elegir un destino para una escapada de fin de semana, nada mejor que decantarse por lugares cercanos que aún no conoces. ¿Prefieres el mar o la montaña? Puedes pasar el fin de semana tomando el sol en la playa, bajando en kayak por un río o haciendo un picnic cerca de un lago.
Tal vez prefieras hacer algunas rutas de senderismo por el bosque, o explorar las calles de la ciudad vecina. Puede que la escapada ideal no te lleve lejos de casa (al fin y al cabo, no querrás pasarte la mitad del fin de semana yendo y viniendo de tu lugar de vacaciones), pero seguir tus intereses te permitirá disfrutar allí donde estés.
Piensa en tu compañía
Salir solo tiene sus ventajas, pero una escapada de fin de semana puede ser la oportunidad perfecta para pasar tiempo con su pareja o sus amigos, especialmente si suele estar demasiado ocupado durante la semana.
Además, si piensas pasar este fin de semana especial con alguien más, también deberás tener en cuenta sus gustos y preferencias antes de elegir el destino. Sin duda, una buena compañía aportará alegría a tu viaje y hará que el fin de semana sea más memorable.
Establece un presupuesto
Antes de elegir un destino para tu viaje de fin de semana, el primer paso es fijar un presupuesto. Si no quieres llevarte una sorpresa, establecer un presupuesto aproximado antes de hacer cualquier otra planificación puede ayudarte a dar forma a tu escapada.
A la hora de planificar tu presupuesto, deberás tener en cuenta el coste de aspectos como el transporte, el alojamiento, las actividades o visitas y la comida. Recuerda que se puede viajar cerca de casa con un presupuesto menor.
¿Volar o conducir?
Una vez que tengas una idea aproximada de cuánto quieres gastar en tu viaje de fin de semana, puedes empezar a pensar en dónde quiere ir. Y el lugar al que quieras ir dependerá en gran medida de si estás dispuesto a volar a algún sitio o si prefieres ahorrar dinero y conducir.
Conducir suele ser la opción más barata y te dará mayor flexibilidad, ya que podrás hacer paradas en el camino y alojarte donde quieras, ya que no tendrás que depender del transporte público o de los taxis para desplazarte. La desventaja es que no podrás viajar tan lejos, y puede que tengas que incluir en tu presupuesto los gastos de aparcamiento.
Reserva tu alojamiento perfecto
A la hora de reservar el alojamiento perfecto ten en cuenta el destino y las actividades que piensas hacer en él. Aprovecharás mucho mejor estos pocos días de vacaciones si te alojas en un lugar cercano a los lugares que quieres visitar durante tu estancia.
Lleva poco equipaje
Puede parecer simple y lógico, pero para un viaje de dos o tres días, lleva solo dos o tres conjuntos de ropa. También es bueno minimizar el resto de los complementos y pertenecías de todo tipo en la medida de lo posible.
Lo mejor es evitar los por si acaso y meter en la maleta solo lo que sepas con certeza que vas a utilizar. Hacer la maleta con poco peso significa menos estrés y molestias en tu viaje, que es de lo que se trata cuando te escapas un fin de semana.
Un viaje de fin de semana también puede ofrecer experiencias únicas e inolvidables. Es la mejor manera de renovarte y empezar la siguiente semana con fuerza para alcanzar todas tus metas.
