Subimos al Monte Igueldo de San Sebastián

• por Antonella Grandinetti

En uno de los extremos de la famosa bahía de La Concha se alza impertérrito el Monte Igueldo. El mismo marca el límite entre la preciosa ciudad de San Sebastián y el mar. ¿Has subido alguna vez? Coge papel y bolígrafo, y toma nota de todo lo que puedes hacer en la cima del Hiru Txubilloak.

Sin lugar a dudas, el Monte Igueldo es uno de los puntos de interés más importantes y destacables de Donostia. En su cima encontrarás un parque de atracciones que te robará una sonrisa y, además, tendrás una de las mejores vistas panorámicas de la zona.

Senderismo en el Monte Igueldo

Si te gusta practicar senderismo, no dejes de recorrer la ruta de unos 3 kilómetros que une la base del monte con su cima. Se trata de un recorrido de esfuerzo moderado, ya que incluye tanto escaleras como carretera asfaltada e incluso un camino de tierra.

Tardarás aproximadamente una hora y diez minutos en llevarla a cabo. Aunque no se trata de una ruta que genere grandes desafíos, las vistas desde la cima merecen el paseo.

Otras formas de subir

Por supuesto, puedes subir al Monte Igueldo a pie, como te hemos contado, o en coche, aunque si quieres realizar un viaje al pasado, no hay mejor forma que cogiendo el funicular. Este fue inaugurado por la regente María Cristina en el año 1912 y, por lo tanto, es el más antiguo del País Vasco.

Sus vagones de madera pintada le otorgan un encanto difícil de explicar. Asimismo, durante el viaje podrás disfrutar de la naturaleza en su máxima expresión y disfrutar de unas vistas maravillosas. Además, este funicular te dejará justo a los pies del Parque de Atracciones del Parque Igueldo, un verdadero representante de la Belle Époque.

El mirador y sus maravillosas vistas

Ver la Bahía de La Concha desde arriba es una oportunidad que no debes perderte. Se trata de la mejor manera de comprender por qué ha recibido este nombre. Sin lugar a dudas, el mirador del Monte Igueldo es el sitio perfecto para que realices un sinfín de fotografías.

Desde el mirador, podrás ver la playa de Ondarreta y la playa de La Concha, además de la Isla de Santa Clara que parece una perla en el medio de la bahía de La Concha. También, podrás contemplar el Monte Urgull, dueño de una estatua del Cristo Redentor que nada tiene que envidiar al de Río de Janeiro.

El Faro de San Sebastián

No puedes perderte la visita al faro, una torre de 1855 edificada para proteger la ciudad. Sí, como lees, la misma funcionaba como faro y, como puedes imaginar, ofrece hermosas vistas sobre el mar.

Este faro se ubica en el medio de la naturaleza y los acantilados, y el mar se presenta imponente frente a él. Si subes a la torre, quizá puedas observar parte de la costa guipuzcoana, sobre todo si el día es claro.

El Parque de Atracciones Monte Igueldo

Este parque de atracciones vintage hará las delicias de padres y niños por igual. Al acceder al mismo, sentirás que has vuelto al inicio del siglo XX. Allí te esperan laberintos, montañas rusas que dan sobre el mar, alfombras mágicas, casas encantadas y mucho más.

Solo cuenta con 20 atracciones, por lo que es mucho más pequeño que los parques actuales. Sin embargo, no pasa de moda. No dudes en visitarlo, porque te lo pasarás en grande tanto si viajas solo, en pareja o con niños.

En tu próximo viaje a San Sebastián, no lo dudes y sube al Monte Igueldo. Las vistas panorámicas de la ciudad merecen el paseo. Además, ofrece otras interesantes actividades, como la visita al parque de atracciones más encantador que podrás encontrar.