Caravaca de la Cruz: qué ver y hacer

• por Antonella Grandinetti

Caravaca de la Cruz se ubica en la frontera entre Murcia y Granada. Esta preciosa ciudad destaca por su rica historia y su mezcla cultural debido al paso sucesivo de íberos, musulmanes y romanos. ¿Sientes curiosidad?

Famosa por la cruz homónima, esta población se conoce como Ciudad Santa, ya que según cuenta la leyenda, en el año 1232, dos ángeles bajaron del cielo con una cruz para que un sacerdote preso en el castillo local pudiera dar misa. Se cree que el rey moro Abú Zeid fue testigo de este milagro y, por ello, se convirtió al cristianismo. ¿Te gustaría conocer más sobre Caravaca de la Cruz?

¿Qué ver y hacer en Caravaca de la Cruz?

Sin lugar a dudas, Caravaca de la Cruz es uno de los municipios más bonitos de Murcia, edificado en torno a su castillo que se alza impertérrito y deslumbrante. ¡Te dejará con la boca abierta!

Más allá de su belleza, la aparición que allí sucedió convirtió a este poblado en uno de los más visitados por los turistas religiosos. De hecho, como ya te señalamos, Caravaca de la Cruz es la quinta ciudad santa, junto a Roma, Jerusalén, Santiago de Compostela y Santo Toribio de Liébana.

Coge papel y bolígrafo, y toma nota de sus principales puntos de interés y de sus fiestas más interesantes.

Basílica de la Vera Cruz

El principal monumento es la preciosa basílica que alberga un trozo de madera de la Cruz de Cristo (Lignum Crucis). Aquí fue donde se presentaron los ángeles de la leyenda del inicio de este artículo y, por este motivo, se inició la construcción de este templo dentro del recinto amurallado. (diazepam)

En su interior, podrás observar la cruz patriarcal guardada en un relicario, además de sorprenderte con su arquitectura del Renacimiento y su fachada barroca.

Por supuesto, te recomendamos dar una vuelta por la zona amurallada para que descubras los restos de la fortaleza del siglo XII, entre ellos 14 torreones entre los que destaca la Torre de Chacona (la antigua torre del homenaje).

Ermita de la Reja

Al norte de la basílica, en El Calvario, te toparás con la Ermita de la Reja, que data del siglo XVII y recibe su nombre de la enorme reja de hierro forjado que protege el interior, donde solo se ve una mesa de altar antigua.

Iglesia del Salvador

La construcción de esta iglesia comenzó en 1536, pero las obras nunca finalizaron. Por lo tanto, al acercarte a ella te llamará la atención ver a simple vista que está incompleta. No obstante, es una de las muestras más hermosas de la arquitectura renacentista en Murcia.

En su interior, podrás apreciar un retablo barroco de gran belleza, además de ver unas espectaculares columnas jónicas que sostienen las bóvedas de crucería, la imagen de La Dolorosa y el Cristo del Prendimiento».

Ayuntamiento de Caravaca de la Cruz

Como sucede con la mayoría de los pueblos y las ciudades, el ayuntamiento resulta un edificio digno de ser visitado y fotografiado. El mismo se comenzó a construir en el siglo XVIII.

No dudes en acercarte hasta él y disfruta de la bellísima Plaza del Arco. ¿Una curiosidad? El mismo ayuntamiento se asienta sobre el arco que le da nombre a la plaza.

Templete

El Templete se edificó sobre una antigua capilla como monumento al Baño de la Santa Vera Cruz que se lleva a cabo cada 3 de mayo. Si tienes la posibilidad de presenciarlo, ¡no lo dudes! En dicho acto se bendicen las aguas que riegan todas las huertas del pueblo, una tradición que se remonta al siglo XIV.

Iglesia y Convento de San José

La Iglesia de San José es una de las construcciones más bonitas de Caravaca de la Cruz con sus decoraciones rococó. Entrar dentro de la misma es una experiencia difícil de explicar, ya que su arquitectura obnubila los sentidos.

Paraje Natural Fuente del Marqués

¿Deseas respirar aire puro y vivir una tarde en la naturaleza? Un poco alejado del casco histórico está el Paraje Natural Fuente del Marqués, un sitio poblado de manantiales rodeados de pinos y encinas. ¿Te lo puedes imaginar? Si lo visitas, recorre sus cuevas y la Torre de las Fuentes, también conocida como el Torreón de los Templarios.

Seguramente, después de leer todo esto has decidido visitar Caravaca de la Cruz. ¡No te arrepentirás! Eso sí, recuerda llevar tu móvil con la batería bien cargada para que puedas tomar decenas de fotografías.