7 postres que no te puedes perder en tu visita a Bélgica

• por Elena Sanz

Bélgica enamora por sus ciudades medievales y su arquitectura gótica y renacentista. Sus castillos, su historia y el ambiente vibrante de sus núcleos urbanos son motivo suficiente para visitar este país del norte de Europa. No obstante, los amantes del dulce cuentan con un extra de tentación; y es que, además del famoso chocolate, hay varios postres de Bélgica que conquistan el paladar.

La gastronomía belga es muy variada y posee diversas influencias. Sin embargo, muchos de sus productos más típicos son dulces, ideales para cerrar una comida con buen sabor de boca o para degustar tras un recorrido por Bruselas, Brujas o Gante. En tu visita al país, no puedes perder la ocasión de probarlos y, por ello, queremos contarte más al respecto.

Los mejores postres de Bélgica

La región de Flandes es especialmente propicia para degustar estos manjares, pero en cualquier punto de la nación tendrás la oportunidad de hacerlo. Hojea la carta de postres de cualquier restaurante al que acudas y encontrarás varios de los siguientes tesoros culinarios perfectos para golosos.

1. Chocolate belga

7 postres que no te puedes perder en tu visita a Bélgica
Las chocolaterías belgas sorprenden con su enorme (y exquisita) variedad de bombones.

El chocolate belga es todo un emblema nacional. El país produce al año más de 172 000 toneladas y cuenta con una gran cantidad de chocolaterías. Por ello, hay multitud de productos elaborados con este exquisito ingrediente que no te puedes perder.

Esta delicia le debe su reputación a su fina textura y alto contenido en manteca de cacao. Desde el siglo XVII, los mejores artesanos chocolateros han comercializado sus creaciones que abarcan desde los pralinés hasta la mousse de chocolate. ¡Te encantarán!

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2. Gofres

En tu recorrido por las ciudades belgas, encontrarás puestos ambulantes en los que adquirir este dulce tan típico. Debes saber que hay dos variedades principales: el gofre de Bruselas (rectangular y crujiente) y el gofre de Lieja (de forma ovalada y sabor más dulce).

En ambos casos, hablamos de un producto elaborado a base de harina, levadura, leche, huevo, azúcar y mantequilla. Cuenta con una textura gruesa y mullida, y unos característicos agujeros que se forman en la gofrera donde se cocina.

Es común encontrar el gofre espolvoreado con azúcar, coronado con nata montada o acompañado de fruta y virutas de chocolate. En todas sus variedades, es un imprescindible para los paladares más dulces.

3. Speculoos

Estas galletas son típicas de Flandes y suelen tomarse con el café. Se consumen principalmente en las festividades navideñas y tienen un sabor peculiar que se debe a la mantequilla, el azúcar moreno y la combinación de especias con las que se elaboran.

Esta fusión de canela, jengibre, nuez moscada, clavo, cardamomo y pimienta combina sabores dulces y picantes, dando lugar a un resultado único. Tanto es así que puede adquirirse ya preparada para cocinar las galletas.

4. Cuberdons

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Nadie puede resistirse a estos simpáticos y sabrosos caramelos.

Estos divertidos caramelos con forma de triángulo se preparan con dulce de almíbar y goma arábiga. Tienen un inconfundible sabor a frambuesa y un curioso tono violeta; además, son muy difíciles de encontrar fuera de Bélgica.

Aunque no se conoce con exactitud su origen, se sabe que estos dulces cuentan con más de 150 años de tradición y que su proceso de elaboración es largo y complejo. Por todo ello, son un producto imprescindible a probar en una visita a país.

5. Cramique

Este dulce sirve tanto para postre como para ser consumido en el desayuno y es muy común tanto en Bélgica como en el norte de Francia. Se trata de un pan o un brioche belga de textura esponjosa y que se corta en rebanadas para ser consumido. El cramique se elabora con mantequilla, pasas y azúcar perlado y, pese a ser ligero, es uno de los postres de Bélgica más adictivos.

6. Mattentaart

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Suave y delicada, esta tarta te robará el corazón.

¡Vamos con un postre con denominación de origen! Y es que esta tarta, típica del Flandes oriental, cuenta con Indicación Geográfica Protegida. Su origen genuino se encuentra en Geraardsbergen, aunque hoy en día puede encontrarse en cualquiera de las ciudades principales.

Se trata de un pastel elaborado a base de hojaldre, huevos, azúcar, almendras, leche y cuajo de leche, siendo este último ingrediente la clave de su sabor y calidad. Su textura es densa, pero su sabor te cautivará.

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7. Rijsttaart

Cerramos esta selección con un original, pero delicioso postre. Hablamos de un pastel de arroz con una textura única y un sabor delicioso. Su relleno se elabora con leche, vainilla y canela, además del arroz, nata y azúcar. Este se vierte sobre una masa de harina, azúcar y mantequilla y todo el conjunto se hornea. (www.invisibly.com) Puedes encontrarlo en forma de tartaletas o en tamaños más grandes. Eso sí, siempre exquisito.

¿Qué te han parecido todos estos postres de Bélgica? Como ves, el país ofrece variedad de alternativas para los aficionados al dulce y permite, a través de estas creaciones, conocer más acerca de la historia y la cultura de las regiones. ¿Qué otros motivos se necesitan para probarlos?