¿Te animas a visitar Praga, Budapest y Viena en un único viaje?

• por Antonella Grandinetti

Visitar Praga, Budapest y Viena en un único viaje no solo es posible, sino que también es una excelente idea. ¿Te gustaría comenzar a planificar tus próximas vacaciones? Coge papel y bolígrafo para anotar, porque te contamos qué lugares deberías recorrer.

Las capitales de la República Checa, Hungría y Austria destacan por su belleza arquitectónica y por su embriagador encanto. Recórrelas a gusto y enamórate de sus calles, monumentos, historia y gastronomía.

¿Es posible visitar Praga, Budapest y Viena en el mismo viaje?

Por supuesto, es posible visitar Praga, Budapest y Viena en un único viaje. No obstante, necesitarás al menos 10 días para disfrutarlo al máximo. Si bien es cierto que puedes recorrer las distancias entre las capitales en menor cantidad de tiempo, no podrías conocer las ciudades como se merecen.

Lo ideal es destinar tres días a cada ciudad. El sobrante es, aproximadamente, el tiempo que necesitas para trasladarte entre los diferentes destinos. ¿Qué te parece la idea? No te arrepentirás de hacer este recorrido.

¿Cómo hacer un viaje a Praga, Budapest y Viena?

La elección va a depender de tu gusto personal. ¿Te gusta conducir? Pues, entonces, volar a Praga y conducir desde allí hasta los otros dos destinos puede ser la mejor opción. No obstante, ten en cuenta que durante el verano puede haber bastante tránsito.

Si, por el contrario, deseas una opción más relajada que te permita apreciar el paisaje, piensa en el tren. La conexión entre las tres ciudades es muy buena y si compras los pasajes con tiempo, puedes encontrar buenas ofertas. En líneas generales, el viaje en tren desde Praga a Viena dura alrededor de 4 horas, mientras que el de Budapest a Viena, cerca de 3 horas.

También, puedes volar de una ciudad a otra. Esto dependerá de si consigues buenos precios en los vuelos. Ten en cuenta que deberás sumar el costo de traslado hasta el centro de la ciudad y contabilizar, también, el tiempo antes de volar como tiempo de viaje.

Viaje a Praga, Budapest y Viena: las claves para lograrlo

Planifica bien tu viaje antes de emprenderlo para que puedas conocer los principales puntos de interés de Praga, Budapest y Viena. Cada una de estas ciudades tiene una belleza indescriptible y, por ello, bien merece que pases el tiempo necesario recorriéndolas.

Ten en cuenta que, durante el verano, esta zona estará poblada de turistas. Si tienes la posibilidad, la primavera y el inicio del otoño pueden ser mejores épocas para acercarte a Praga, Budapest y Viena. ¿Por qué? Durante esos meses, el clima es templado y los precios más accesibles, además de haber menor cantidad de turistas en los principales sitios de interés.

¿Qué ver en Praga?

La capital de la República Checa es una de las joyas de Europa. De hecho, son muchas las personas que sostienen que es la capital más bonita del continente. Quizás esto se deba a su magnetismo que parece transportarte en el tiempo.

El Castillo de Praga es el símbolo de la ciudad. Esta construcción medieval fortificada te dejará con la boca abierta. Además, descubrirás los edificios que lo rodean como la Catedral de San Vito y el Callejón del Oro, una pequeña callejuela con bonitas casas de colores.

Además, deberías acercarte a la Torre de la Pólvora, dueña de increíbles vistas panorámicas de la ciudad; la Plaza de la Ciudad Vieja, rodeada del Ayuntamiento, las Iglesias de Nuestra Señora de Tyn y de San Nicolás; y el Clementinum, la antigua sede de la universidad y el colegio jesuita. Si te queda tiempo, acércate al Lesser Quarter, el barrio más bohemio de Praga, y al Barrio Judío, donde está al casa de Franz Kafka y la sinagoga más antigua del mundo.

Los principales lugares de interés en Budapest

Budapest, la capital de Hungría, está dividida por el río Danubio; así, de un lado está Buda y del otro, Pest. «La perla del Danubio» te robará el corazón con su majestuosidad. Entre sus monumentos, destacan el Parlamento, una edificación inmensa que se comenzó a construir en 1884, y el Castillo de Buda, un símbolo presente en todas las postales de la ciudad. Para llegar al castillo neoclásico, puedes andar o coger el funicular.

¿Tienes ganas de recorrer más de Budapest? Camina hasta el Puente Széchenyi, más conocido como «Puente de las Cadenas» y da un paseo por el Bastión de los Pescadores con sus 7 torres que inmortalizan a las siete tribus que fundaron el país. Antes de irte de la ciudad, ingresa a la Basílica de San Esteban; pasea por la Plaza de los Héroes, declarada Patrimonio de la Humanidad por Unesco; y aprende historia en el Museo del Holocausto.

Visita Viena

La capital de Austria es una ciudad majestuosa que parece salida de un cuento de princesas y caballeros. En pleno centro se alza imponente el Palacio Hofburg, antigua residencia de la familia real. En su interior, podrás contemplar joyas, vajilla y toda clase de tesoros reales, incluyendo el Museo Sisí.

Asimismo, deberías acercarte a la Catedral de San Esteban, una construcción del siglo XII con una magnífica torre decorada con azulejos; el Palacio Belvedere, un precioso palacio barroco con una enorme fuente; y el Prater, el parque de atracciones más antiguo del mundo con una altísima noria de 60 metros.

Por supuesto, deberías visitar el Palacio Schönbrunn, ubicado en las afueras de la ciudad. Si tienes la posibilidad, ingresa a la residencia de verano para descubrir la lujosa decoración y recorre los enormes jardines.

¿Qué te parece viajar a Praga, Budapest y Viena en tus próximas vacaciones? Como puedes ver, se trata de un viaje maravilloso que te sorprenderá a cada paso del camino.