¿Estás planeando tus próximas vacaciones en las Islas Baleares? Entonces, coge papel y bolígrafo y toma nota de los planes en Mallorca que no deberías perderte. Te presentamos actividades para todos los gustos, edades y presupuestos. ¿Estás preparado?
La Isla Bonita es dueña de preciosas playas y calas, cuevas de ensueño, espacios naturales que quitan la respiración y una interesante oferta cultural. No importa cuáles sean tus preferencias, Mallorca tiene oportunidades para que todo el mundo lo pase en grande.
Ingresar a La Seu de Palma de Mallorca
Los turistas se acercan a Mallorca por sus playas, pero no deberías dejar de visitar la capital de la isla. Tómate al menos medio día para recorrerla, aunque te aseguramos que podrías necesitas bastante más tiempo para explorar todos sus puntos de interés.
El lugar ineludible es La Seu, la famosa catedral de Palma de Mallorca. Llegar hasta ella no será un problema porque sus dimensiones son tan imponentes que la misma se observa desde cualquier punto de la ciudad. Su arquitectura gótica levantina te enamorará. Presta especial atención al órgano, del siglo XVIII.
Planes en Mallorca: haz un tour al Palacio de La Almudaina
Al salir de la catedral de Mallorca, ingresa en el bonito Palacio de La Almudaina, una construcción de la época de la conquista musulmana que funciona como una de las residencias de la familia real española. Disfruta de su colección de arte y esculturas, y suspira con la belleza de la capilla de Santa Anna y el Salón del Trono. Por supuesto, el Patio de la Reina es otro de los grandes recomendados.
Toma fotos panorámicas desde el Palacio de Bellver
En lo alto de un monte, se alza impertérrita esta fortaleza del siglo XIV que, curiosamente, es redonda. Más allá de sus bonitas torres, en su interior funciona el Museo de Historia de la Palma, sitio donde podrás aprender sobre el desarrollo de la isla. No obstante, lo más llamativa es su impresionante vista panorámica. ¡Lleva el móvil con suficiente batería para tomar cientos de fotografías!
Recorre las playas y calas de la Isla Bonita
Las dimensiones de Mallorca invitan a alquilar un coche para recorrer playas y calas en total tranquilidad. Sin lugar a duda, es uno de los mejores planes en Mallorca. Prepara una nevera con un picnic y bastante bebida, y sal a la aventura.
Acércate a la playa virgen Varques, en Manacor. La misma está rodeada por un bonito bosque de pinos y rocas con cuevas subterráneas. ¡Es el sitio ideal para bucear y descubrir el fondo marino local! Practica deportes acuáticos como kitesurf o windsurf en playa de Muro o, simplemente, dedícate a leer un libro y bañarte en las transparentes aguas de cala S’Amador, cala Mitjana, cala Romántica o cala Agulla.
La Sierra de la Tramontana, entre los mejores planes en Mallorca
No puedes abandonar la Isla Bonita sin conocer la Mallorca más auténtica, esa marcada por las montañas y los bosques. La Sierra de la Tramontana es el área montañosa de mayor importancia de las islas Baleares y, también, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por las Unesco.
Sal de ruta por la zona y respira aire puro, piérdete entre antiguas casas con muros de piedra y la belleza natural de la región. Practica senderismo y visita, de este modo, los pueblos más bonitos de la Tramontana, como Valldemossa, con sus casas tradicionales y sus callejuelas estrechas y empinadas; Banyalbufar, con sus calles de piedra; o Pollença, donde podrás visitar el Monte Calvario tras subir 365 escalones.
Por supuesto, a lo largo del recorrido te encontrarás con calas de increíble belleza, al igual que sucede a lo largo de toda Mallorca. Entre ellas, destacan en la Tramontana la cala Sa Calobra y Cala Tuent.
Sorpréndete en las cuevas del Drach
Las famosas cuevas del Drach son uno de los planes en Mallorca que no puedes eludir… ¡ni tampoco deberías hacerlo! Emplazadas en Manacor, tienen una profundidad de hasta 25 metros. Asimismo, en su interior podrás contemplar el precioso lago Martel e, incluso, recorrerlo en barca.
Pero eso no es todo… Las estalagmitas y estalactitas que decoran cada uno de los espacios de las cuatro cuevas -Blanca, Negra, del Francesos y de Lluis Salvador- generan toda clase de sombras gracias a los diferentes juegos de luces allí instalados. ¡Te invitarán a tomar cientos de fotografías!
Acércate al Parque Natural de Mondragón
En el Parque Natural de Mondragón, podrás avistar más de 70 especies de aves migratorias, pero también descubrir la flora y fauna local, como murciélagos rabudos, lirones, martas y ginetas, romero, lavanda y orquídeas salvajes, entre otros.
Por otro lado, hay varios recorridos de senderismo, uno tan sencillo que es recomendado para familias con niños. Si te interesa la historia, uno de estos caminos te permitirá descubrir el Caló d’en Perdiú y otros famosos restos arqueológicos. Tras una larga caminata, sumérgete en las transparentes aguas de las calas locales.
Planes en Mallorca: Sant Elm y Sa Dragonera
En el norte de Mallorca, te espera un pueblo pesquero repleto de encanto: Sant Elm. Pasea por sus callejuelas, prueba sus platillos a base de pescado fresco y coge un barco hasta la isla Sa Dragonera. Allí está el Parque Natural homónimo que engloba la mencionada isla y también los islotes Mitjana y Pantaleu.
¿Te gusta el senderismo? Pues bien, ponte calzado cómodo y recorre el parque. Podrás contemplar el faro de Tramontana y el Faro Viejo (Faro Vell), que data de 1850; además, de encontrar miradores con unas vistas panorámicas que serán tu perdición.
Ver la puesta del sol en Cabo Formentor
En el norte, hallarás uno de los grandes emblemas de la isla: Cabo Formentor. La zona llama la atención por su enorme belleza y sus múltiples miradores que posibilitan que tomen las fotografías más bonitas de Mallorca. Ahora bien, lo mejor que puedes hacer es buscar un lugar en Cabo Formentor y esperar allí interrumpe ver la puesta del sol. Las luces del atardecer le confieren a la región una magia difícil de explicar.
Estos son los planes en Mallorca que no deberías perderte en tu próximo viaje. Si tienes suficiente tiempo, suma a estas opciones una visita a Portocolom, un pueblo pescador tradicional, o al Parque Nacional de Cabrera, que protege las praderas de posidonia del fondo marino local.