Recorre y disfruta Malta

• por Elena Sanz

Malta es un país mediterráneo desconocido para muchos, pero repleto de encantos y singularidades. Pese a su pequeña extensión (unos 316 km² entre las tres islas), alberga idílicas aguas turquesas, una gran riqueza histórica y un acervo cultural que es el resultado de la fusión de los diferentes grupos étnicos que poblaron el archipiélago.

Si tienes pensado visitar este maravilloso destino, te contamos lo que debes saber al respecto. Malta, Gozo y Comino son las tres islas que componen este archipiélago ubicado entre Sicilia y la costa norte de África.

Es una nación de tradiciones, con una fuerte influencia católica y el único país mediterráneo donde el inglés es la lengua oficial. Esto se debe a que Malta estuvo bajo dominio británico durante 160 años.

Una visita a su territorio te permitirá descubrir su folklore, su arquitectura y gastronomía, disfrutar de fantásticas playas y conocer su interesante pasado. ¿Estas preparado? ¡Comenzamos!

¿Qué ver y hacer en Malta?

A continuación, compartimos contigo algunos atractivos imprescindibles que no puedes dejar de conocer durante tu visita a Malta.

La Valeta

Vista desde el mar de la capital de Malta, La Valeta
La Valeta es la capital más pequeña de la Unión Europea, con una población de alrededor de 6000 habitantes.

La capital del país es un buen punto de partida para tu recorrido. Esta pequeña ciudad tiene su origen en una antigua fortificación del siglo XVI y destaca por su bella arquitectura, sus museos y las increíbles vistas que proporciona del mar y los alrededores.

Además de pasear por sus pintorescas calles empedradas, te recomendamos visitar la catedral de San Juan, el Museo Nacional de Bellas Artes y los jardines de Barraka. ¡Te encantarán!

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Las mejores playas de Malta

En Malta, no encontrarás extensas playas idílicas de arena fina, pero sí algunos rincones costeros llenos de encanto. Son puntos perfectos para disfrutar del clima, relajarse y admirar las cristalinas aguas del mediterráneo. Algunas de las más famosas y que no te puedes perder son Golden Bay, Ghan Tuffieha Bay y Paradise Bay.

El Hipogeo de Hal Saflieni

Este es el monumento más antiguo de Malta y consiste en una antigua necrópolis subterránea situada en Paola. Se cree que tiene más de 6000 años de antigüedad y que pasó de ser un templo sagrado a un lugar de enterramientos.

En tu visita, podrás observar murales y otros elementos arquitectónicos funerarios esculpidos en la roca a medida que desciendes los tres niveles que componen el monumento.

Foto desde el aire de Paradise Bay
Paradise Bay es una hermosa playa situada en el extremo norte de la isla, cerca de la ciudad de Cirkewwa.

Silema y St Julians

Silema y St Julians son los dos puntos más turísticos de Malta, perfectos para quienes busquen animación y múltiples opciones de ocio. Aquí, encontrarás hoteles, tiendas y centros comerciales, así como diversos clubes y restaurantes donde probar la gastronomía del país.

Desde Silema, además, obtendrás unas fantásticas vistas de La Valeta y en St Julians disfrutarás del mejor ambiente nocturno.

Mdina y Rabat

Mdina es un pequeño pueblo del interior que no puedes dejar de visitar. Antiguamente, fue la capital de Malta y es también el enclave en el que se rodaron varias escenas de la famosa serie «Juego de Tronos».

Esta ciudad amurallada destaca por su arquitectura medieval y la mejor forma de conocerla es perderse paseando por sus calles. Además, cerca de aquí se encuentra Rabat, donde no puedes perderte las catacumbas de St Paul y Santa Agatha.

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Marsaxlokk y Piscina de San Pedro

Si buscas un lugar tranquilo, pero lleno de encanto y esencia, ese es Marsaxlokk. Este pequeño pueblo de pescadores destaca especialmente por su puerto, en el que las típicas barquitas maltesas pintadas de colores descansan formando una estampa de postal. Es el punto ideal para degustar un buen pescado frente al mar o disfrutar recorriendo los puestecitos del mercado que aquí se realiza.

Por otro lado, a escasos tres kilómetros de aquí se encuentra St Peter’s Pool, una pequeña bahía excavada en la roca que hace las veces de una piscina natural y es uno de los mejores puntos para practicar snorkel.

La Gruta Azul, una joya natural en Malta

Fotografía desde el cielo de la Gruta Azul
Haz un recorrido en bote desde el puerto de Wied iz-Zurrieq hasta la cueva.

Este es otro de los mayores atractivos de Malta y un lugar ya emblemático para los turistas. Se trata de una serie de cuevas naturales excavadas entre unos acantilados de roca sobre el mar.

Las visitas a estas grutas marinas se realizan en pequeñas barquitas que parten de la bahía y atraviesan las estrechas cavidades, ofreciendo un espectáculo visual incomparable. Además, practicar buceo en la zona te permitirá descubrir un arrecife, así como los restos de un barco naufragado.

Gozo y Comino

Si aún dispones de tiempo, no dudes en reservar un espacio en tu viaje a Malta para conocer las islas de Gozo y Comino. Estas están mucho menos pobladas que la isla principal, pero en temporada alta pueden estar masificadas por los turistas.

Aun así, vale la pena disfrutar de sus paisajes y playas, y especialmente de la conocida Blue Lagoon, una bahía de arenas blancas y aguas turquesas cuya imagen quedará en tu retina para siempre.

Como ves, Malta es un destino de lo más completo e interesante. Pese a sus pequeñas dimensiones, está repleto de riquezas y atractivos por conocer, tanto si buscas cultura e historia como si prefieres la naturaleza. Por ello, organiza bien tu itinerario y prepárate a descubrir este maravilloso rincón mediterráneo.